Pedaliodes japhleta Butler, 1870
sátiro montano, montane brown butterfly
Pedaliodes japhleta presenta alas anteriores obtusas hacia el ápice, la superficie de ambas en la región dorsal es de color marrón
oscuro. En el área ventral, antes del ápice del ala anterior, posee un punto gris claro finamente punteado con marrón. Difiere de
otras especies del género por la mancha triangular blanca y mayor tamaño en el margen interno del envés de las alas posteriores.
Las hembras poseen puntos de una tonalidad rojiza rústica en la zona media del margen distal (Weymer 1912).
P. japhleta es endémica de la cordillera de Mérida. Habita entre 2000 y 2600 m de altitud, y puede localizarse en toda la
extensa montaña, excluyendo la región de Niquitao. Hace alarde de un vuelo robusto, manteniéndose normalmente a una
distancia de un metro del suelo. Se ha observado asociada a retoños de bambú del género Chusquea (Adams y Bernard 1981).
En las primeras descripciones de Pedaliodes japhleta (Weymer 1912, Adams y Bernard 1981) se refiere que es localmente abundante. Sin embargo, en estudios de
comunidades de mariposas montanas se estimó que representaba menos del 1% de los individuos en la localidad de El Baho, y entre 6-7% en Monte Zerpa (Pyrcz y Garlacz
2012). Según la descripción de su hábitat, ocupa un área igual o menor a 836 ± 63 km2 (AOO), en una extensión inferior a 15.000 km2 (EOO). Su hábitat se muestra
bastante fragmentado e intervenido de un modo moderado por actividades humanas (Ferrer-Paris MSa). Fue considerada como especie poco común dentro del grupo
de mariposas marrones andinas evaluadas a nivel global (Adams 1983), y catalogada con Datos Insuficientes en la revisión nacional de especies amenazadas de 2008
(Rodríguez, J. P. y Rojas-Suárez 2008). La información disponible sugiere que es Vulnerable según el criterio B1ab(iii).
Esta especie se encuentra amenazada por la pérdida de calidad y extensión de su hábitat, vulnerable a la fragmentación. La vegetación asociada al piso altitudinal donde
hace vida ha sufrido profundas transformaciones en los últimos veinte años a causa de las acciones humanas y se considera amenazada a nivel regional (Oliveira-Miranda
et al. 2010c). Entre los principales problemas que enfrenta este hábitat se cuentan los frecuentes incendios, la extensión de la frontera agrícola, la ganadería, la introducción
de especies exóticas y la colonización de vertientes (Durán y Castaño 2004).
No se han tomado medidas para la protección de Pedaliodes japhleta, aunque más del 40% de su hábitat está dentro de los linderos de los parques nacionales y
monumentos naturales de la cordillera de Mérida (Ferrer-Paris MSa). No obstante hay que tener en cuenta que las zonas circundantes están bajo presión debido al
incremento de la densidad poblacional y el uso de las tierras para actividades agropecuarias (Azócar y Fariñas 2003). Resulta necesario profundizar en la ecología, el ciclo
de vida y la dinámica poblacional de la especie, sobre lo cual existe muy poca información disponible.