Se caracteriza por presentar en el cuerpo un pelaje que varía de castaño claro a castaño oscuro o marrón a rojizo; en las extremidades y cola presenta una coloración que varía de marrón oscuro a negro, siendo estas últimas las partes más oscuras del cuerpo. En la frente presenta pelaje erecto semejando unos cachos de allí su nombre, el rostro puede presentar pelaje corto que se esparce sobre la piel negra. Es una especie relativamente grande, la longitud entre cabeza cuerpo está entre 35 y 49 cm, y posee una cola prensil de entre 38 y 49 cm, los machos pesan alrededor de 3,7 kg y las hembras 2,3 kg. Es un animal omnívoro, que se alimenta preferiblemente de frutos e invertebrados, aunque algunas veces atrapa pequeños vertebrados, tales como lagartijas y polluelos de aves; también se alimenta de otras partes de plantas.
La única población existente se encuentra en la Isla de Margarita, donde permanece aislada del resto de la especie y conforma una subespecie endémica denominada Cebus apella margaritae. Su distribución está seriamente fragmentada y restringida a parches de bosque húmedo tropical, en la Serranía El Copey y los cerros El Tamoco, Tragaplata, La Valla y Matasiete.
Su hábitat esta disminuyendo por cuestiones de urbanismo y agricultura. Se le extermina al ser considerado una plaga para los cultivos. Se le captura para su uso como mascota. La fragmentación poblacional está ocasionando un problema de deterioro genético por endogamia lo que determina la pérdida de su vitalidad.
Figura en la categoría En Peligro Crítico de la lista de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) y está incluido en la Lista Oficial de Animales en Peligro de Extinción de Venezuela (Decreto N° 1.486 de la Presidencia de la República del 11de septiembre de 1996).