La Reinita Rayada es un pájaro de doce a catorce centímetros de longitud. Como es habitual dentro de su género, posee un acusado dimorfismo tanto sexual como estacional.
Es una especie marcadamente migratoria cuyas áreas de cría y de invernada están muy separadas, incluso más de lo habitual en este género ya de por sí muy migratorio. El territorio de cría coincide más o menos con casi todo Canadá y Alaska excepto las zonas fronterizas, pues no llega a penetrar en Estados Unidos salvo muy localmente en Nueva Inglaterra, mientras que el área de invernada se sitúa únicamente en el tercio norte de Sudamérica.
Anida en una amplia zona septentrional de América del Norte, desde Alaska hasta Terranova, y desde la línea de los árboles hasta el sur de Canadá y Nueva Inglaterra. Durante la migración, viaja al sur, atravesando el oriente de los Estados Unidos y las Antillas para invernar en Colombia, Venezuela, las Guayanas y una considerable zona del Amazonas noroccidental. En la época reproductora vive en bosques de coníferas y durante la invernada en distintos hábitats. Puede encontrarse desde el nivel del mar hasta elevaciones medianas o altas.
ha sido evaluada más recientemente para la Lista Roja de Especies Amenazadas de la UICN en 2018. Setophaga striata figura como Casi Amenazada según los criterios A2ac+3c+4ac.
Pérdida de hábitat: La tala de bosques y matorrales debido a la urbanización, la agricultura y la tala está reduciendo el hábitat de la reinita rayada.
Cambio climático: El cambio climático está provocando que los hábitats de la reinita rayada se desplacen hacia el norte. Esto está dificultando que las aves se adapten a su nuevo entorno.
Contaminación: Los contaminantes ambientales, como los pesticidas y los herbicidas, pueden dañar a la reinita rayada y a su hábitat.