Mannophryne venezuelensis Manzanilla, Jowers, La Marca, & García-París, 2007
Sapito Acollarado de Venezuela, Paria Collared Frog
Es una especie ribereña diurna que habita a lo largo de estrechos arroyos de montaña rodeados de bosques tropicales premontanos, montanos y nubosos, desde el nivel del mar hasta aproximadamente 1.000 m snm (Edwards 1974, Donoso-Barros 1965, Manzanilla et al. 2007, Rivas et al. 2018). Durante la temporada de lluvias, cuando los niveles de humedad son altos en el sotobosque, esta rana extiende su área de distribución hacia el bosque, dispersándose a decenas o cientos de metros de los arroyos y eventualmente alcanzando otros cuerpos de agua (D. Flores, obs. personal). Se sospecha que observaciones similares llevaron a Barrio-Amorós et al. (2010) para sugerir que esta especie es terrestre en lugar de ribereña. Algunas poblaciones habitan en arroyos rodeados de plantaciones de cacao (Manzanilla et al. 2007) de lo que se infiere cierto grado de tolerancia a la modificación del hábitat. Los machos llaman desde las rocas a lo largo de los arroyos, durante el día (Donoso-Barros 1965). Su llamado publicitario se describe en Edwards (1974) y Manzanilla et al. (2007). Se presume que la anidación terrestre junto a los arroyos ocurre como en otros Mannophryne. El transporte de renacuajos lo llevan a cabo los machos después de que los renacuajos eclosionan, y se ha documentado que los machos transportan de 7 a 10 renacuajos a la vez (Manzanilla et al. 2007). Los renacuajos se desarrollan en pequeños charcos cerca de arroyos (Rivas et al. 2018). No ha sufrido cambios taxonómicos y no existen dudas sobre la validez de esta especie. Su posición filogenética, como parte de Mannophryne y perteneciente al grupo de especies M. trinitatis, ha sido corroborada por Manzanilla et al. (2009), Grant et al. (2017) y Rojas-Runjaic (2019).
Esta especie es conocida en numerosas localidades a lo largo de la Península de Paria, en el estado Sucre, Venezuela desde el nivel del mar hasta aproximadamente 1.000 m snm (Donoso-Barros 1965, Manzanilla et al. 2007, Barrio-Amorós et al. 2010, Rivas et al. 2018, D. Flores, obs.). Aunque se desconoce el límite occidental de su área de distribución, es probable que esté restringido a la Serranía de Paria. Su extensión estimada actual de ocurrencia (EOO) es de 3.045 km2.
Es común en toda su área de distribución (Angulo 2008, Rivas et al. 2018) y su población parece estable.
La principal amenaza para esta especie es la degradación y pérdida de hábitat debido a la agricultura a pequeña escala (plantaciones de café y cacao y cultivos de subsistencia), la tala selectiva para la recolección de madera y los incendios forestales provocados por el hombre, principalmente en la vertiente sur de la Serranía de Paria ( La Marca y Manzanilla 2004, Manzanilla et al 2007, Kaiser et al 2015, Rivas et al 2018, D. Flores obs. persona). Aunque parte de su área de distribución se superpone con el Parque Nacional Península de Paria, la falta de vigilancia y cumplimiento de la legislación socava la función protectora del parque y expone el área protegida a las amenazas enumeradas anteriormente (Kaiser et al. 2015). La quitridiomicosis representa una amenaza potencial para la especie, pero aún está pendiente de evaluación la ocurrencia de Batrachochytrium dendrobatidis en comunidades de anfibios de esa región.
Catalogada como Casi Amenazada porque, a pesar de tener una extensión de ocurrencia (EOO) de 3,045 km2 donde la disminución de los bosques siempre verdes y nubosos debido a la tala, los incendios y las actividades agrícolas es una amenaza constante, esta especie es abundante y parece tolerar cierto grado. de perturbación.
Acciones de conservación implementadas
No existen acciones de conservación específicas para esta especie, pero la extensión de su presencia conocida se superpone con el Parque Nacional Península de Paria. Esta especie está catalogada como Casi Amenazada (NT) en la Lista Roja de Fauna de Venezuela (Rodríguez et al. 2015).
Conservación necesaria
Se necesita una gestión, vigilancia y aplicación eficaces de las restricciones dentro del Parque Nacional Península de Paria. Fortalecer el cumplimiento de las leyes nacionales relacionadas con la protección de cuencas también contribuiría a la conservación de esta especie fuera de áreas de protección estricta.
Investigación necesaria
Debido a que la biología de esta especie y los límites de su extensión al oeste de su área de distribución son poco conocidos, se requiere investigación sobre su historia natural, tamaño y tendencias de la población y distribución geográfica. Además, debido a que la quitridiomicosis representa una amenaza potencial para la especie, se necesita más investigación sobre la aparición y prevalencia de Batrachochytrium dendrobatidis y la vulnerabilidad de la especie a la enfermedad causada por este hongo.