Entre la fauna más representativa imperan los reptiles, lagartos e iguanas. Diversas especies de aves como el gavilán primito, el cardenal coriano, el cari-cari y el perico cara sucia. En la zona de Manglares se observan aves como la tijereta, el flamenco, la corocora y la garza paleta.
La vegetación es una de las más diversas y singulares del país. Se trata de un conjunto de plantas adaptadas a las condiciones áridas y salinas de este ecosistema, que se caracteriza por la presencia de grandes dunas de arena. Entre las especies más representativas se encuentran el cardón, el cují, la tuna, el dividivi y el cocuiza.
El clima uno de los más áridos de Venezuela, con una temperatura promedio que oscila entre los 26 °C y los 29 °C, y que puede llegar a los 35 °C o bajar a los 16 °C en algunos casos. Las precipitaciones son escasas, de 250 a 498 mm anuales, y se concentran en los últimos meses del año. El viento es un factor determinante en el clima y el paisaje de los médanos, ya que sopla de este a oeste con una velocidad media de 25 km/h y una intensidad máxima de 100 km/h
Está relacionada con el origen y la composición de las arenas que forman las dunas. Estas arenas provienen de la erosión eólica de las rocas que se encuentran en el golfo de La Vela y en el golfo de Venezuela, así como de los sedimentos que arrastran los ríos que desembocan en estas zonas
*** marinos, manglares ***
*** Médanos de Coro, Dunas, desierto de coro, arenas nómadas ***
Es un paisaje natural formado por dunas de arena que se extienden a lo largo de la costa noroccidental de Venezuela. Se trata de un ecosistema único en el país, que alberga una gran diversidad de flora y fauna adaptada a las condiciones áridas y cambiantes del lugar. Los médanos son el resultado de la erosión eólica de las montañas cercanas y de la acumulación de sedimentos marinos.
Ocupa una superficie aproximada de 91.280 hectáreas, que abarcan parte de los municipios Miranda y Falcón del estado Falcón. Se encuentran dentro del Parque Nacional Médanos de Coro, creado en 1974 para proteger este patrimonio natural.
El parque nacional fue establecido por Decreto N° 1.592 de fecha 6 de febrero de 1974, con la finalidad de proteger este ecosistema único y vulnerable ante los efectos negativos provocados por el desarrollo regional y la afluencia turística. El parque está bajo la administración del Instituto Nacional de Parques (INPARQUES) y cuenta con un plan de ordenamiento y reglamento de uso. Los médanos están sometidos a una constante dinámica de formación y desplazamiento, debido a la acción del viento y las mareas. Esto hace que su forma y tamaño varíen constantemente, creando escenarios sorprendentes y diversos.
El parque nacional enfrenta diversas amenazas que ponen en riesgo su integridad ecológica y su valor paisajístico. Algunas de estas amenazas son: – La extracción ilegal de arena para fines comerciales o domésticos, que altera el equilibrio dinámico de las dunas y reduce su superficie – La contaminación por residuos sólidos y líquidos que se generan por la actividad humana en el parque o en sus alrededores, que afectan la calidad del suelo, el agua y la biodiversidad – La invasión de especies exóticas, como el pino caribeño o el eucalipto, que compiten con la vegetación nativa y modifican el hábitat de la fauna silvestre – El cambio climático, que puede provocar sequías más intensas y prolongadas, aumentar la temperatura y la erosión eólica, y disminuir la disponibilidad de agua. – La falta de conciencia y educación ambiental de los visitantes y habitantes locales, que realizan actividades inadecuadas o dañinas para el parque, como encender fogatas, arrojar basura, conducir vehículos sobre las dunas o extraer plantas o animales
El parque nacional tiene un alto valor ecológico y paisajístico, ya que preserva el desierto costero más importante de Venezuela y el área protegida más cercana al Golfo de Venezuela, además, alberga una gran diversidad de especies vegetales y animales, algunas endémicas y en peligro de extinción, que se han adaptado a las condiciones áridas y ventosas del lugar. También tiene un alto valor cultural e histórico, ya que guarda el testimonio de los primeros pobladores indígenas y coloniales de la región.