> El chingolo, chincol, copetón, cachilo, pichitanca, comemaíz

Zonotrichia capensis

Taxonomía

Nombre científico:
Zonotrichia capensis
Dominio:
Eukarya
Reino:
Animalia
Filo:
Chordata
Clase:
Aves
Orden:
Passeriformes
Familia:
Emberizidae
Género:
Zonotrichia
Estado de conservación:
Preocupación menor
Nombres comunes:
El chingolo, chincol, copetón, cachilo, pichitanca, comemaíz

Información

Descripción:
Mide entre 13 y 15 cm de largo, pesa entre 20 y 25 g. El pico es corto y recto, de unos 15 mm. Muestra la corona y la cara grises, con una banda negra. La garganta es blanca, con un visible collar en la nuca de color canela o castaño rojizo. El vientre y el pecho son pardo claro o blanquecinos, con reflejos más oscuros y los costados grisáceos. El dorso es también pardo, manchado de negro, con las alas y la cola de tono más oscuro. Los juveniles tienen plumaje más uniforme, con jaspeado más oscuro en el pecho. Las patas están bien adaptadas a su hábito arborícola, con tres dedos orientados hacia delante y uno hacia atrás. Es solitario, formando parejas en época de reproducción; más rara vez forma bandadas monoespecíficas o con otros paseriformes. Pasa mucho tiempo en árboles y arbustos, aunque baja a tierra a recoger su principal alimento, semillas y gusanos. Habita una gran variedad de entornos, desde praderas abiertas y estepas hasta bosques, plantaciones agrícolas y ambientes urbanos. Permanece activo hasta entrado el anochecer.
Distribución:
Esta especie se distribuye por toda América del Sur, incluyendo Tierra del Fuego e isla de los Estados, América Central, Aruba, Curazao y la isla La Española (República Dominicana y Haití).1​En la parte norte y oeste de su área de distribución, esta ave generalmente abundante se encuentra en altitudes de 600 a 4000 m s. n. m., pero hacia el este y el sur, se encuentra en altitudes más bajas, casi al nivel del mar. Se puede ver en prácticamente cualquier hábitat abierto o semiabierto, incluidos cultivos, jardines, parques, pastizales y arbustos secundarios o el Cerrado. Se adapta bien a los entornos urbanos y suburbanos, pero está ausente en las secciones densamente boscosas de la cuenca del Amazonas. También es escasa en el escudo guayanés y se encuentra principalmente en algunos tepuyes y la sierra de Pacaraima. Para explicar la presencia de esta especie en la isla de La Española y su ausencia en el resto del Caribe, se puede hacer referencia a una teoría propuesta para el piquituerto de La Española, un ave simpátrica. En ese escenario, los antepasados de estas aves estuvieron presentes en toda la región con el clima más fresco del último período glacial, pero quedaron relegados a las montañas más altas de La Española (las más altas del Caribe) una vez que el clima se hizo más cálido.
Situación:
El copetón común está clasificado como “de menor preocupación” por la UICN. Sin embargo, está amenazado por la pérdida de hábitat y el comercio de mascotas.
Amenazas:
Pérdida de hábitat La pérdida de hábitat es la principal amenaza para el copetón común. La tala de árboles para la agricultura, la ganadería y la minería está destruyendo los bosques y otros hábitats donde vive esta especie. comercio de mascotas El copetón común es una especie popular como mascota. Es un ave pequeña y atractiva que es fácil de cuidar. Sin embargo, la captura de esta especie para el comercio de mascotas es una amenaza importante para su supervivencia. Otras amenazas El copetón común también está amenazado por la contaminación y el cambio climático. La contaminación del aire y el agua puede dañar la salud de las aves. El cambio climático está provocando cambios en los patrones climáticos y en las plantas y animales que viven en los bosques. Estos cambios pueden dificultar que el copetón común encuentre comida y refugio.
Conservación:
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