El mono verde (Chlorocebus sabaeus) es una especie de primate catarrino de la familia Cercopithecidae. Es una especie muy común y extendida en África subsahariana, y se encuentra en una amplia gama de hábitats, incluyendo bosques, sabanas y zonas urbanas.
Los monos verdes tienen una longitud corporal de entre 40 y 50 centímetros, sin contar la cola, que mide entre 50 y 65 centímetros. Su peso varía entre 4 y 7 kilogramos. Los machos son ligeramente más grandes que las hembras.
Los monos verdes tienen un pelaje de color dorado verdoso, con la punta de la cola de color amarillo dorado. La cara es de color azul claro, con la boca y las orejas de color negro. Los ojos son grandes y de color marrón oscuro.
Los monos verdes son animales diurnos y sociales. Viven en grupos de hasta 80 individuos. Son muy vocales y utilizan una amplia gama de llamadas para comunicarse entre sí.
Los monos verdes son omnívoros. Su dieta se compone de frutas, hojas, flores, insectos y pequeños vertebrados.
Los monos verdes (Chlorocebus sabaeus) se encuentran en África subsahariana occidental, desde Senegal hasta el río Volta. También se han introducido en las islas Santiago y Brava del archipiélago de Cabo Verde en la segunda mitad del siglo XVI, y en las islas caribeñas de San Cristóbal, Nieves, San Martín y Barbados a finales del siglo XVII.
Los monos verdes son animales muy adaptables y se pueden encontrar en una amplia gama de hábitats, incluyendo bosques, sabanas y zonas urbanas. Son muy comunes en las ciudades de Senegal, Gambia y Guinea-Bissau.
Las principales amenazas a los monos verdes (Chlorocebus sabaeus) son la pérdida y fragmentación del hábitat, la caza y el comercio ilegal de mascotas.