Es un roedor de gran tamaño entre 30 y 60 cm, prefiere el clima frío de montaña y es similar a una rata, pero mucho más grande, de pelaje marrón o gris con parches más claros, de ojos «salidos» prácticamente de color negro o azul, su cola suele ser corta de entre 2 a 3 cm y sus patas poseen garras que le puede funcionar para sostener alimentos mientras los come, se encuentra literalmente solo y se considera como un animal independiente. La hembra suele ser 10 o 20 cm más grande que el macho.
Esta especie se encuentra en las montañas de Perú, Ecuador, Bolivia, Colombia y el noroeste de Venezuela en un rango de elevación de aproximadamente 2.000 a 4.000 m (Patton 2015).
Esta especie está catalogada como Casi Amenazada porque probablemente se encuentra en un declive significativo (pero probablemente a una tasa de menos del 30% en diez años) debido a la pérdida generalizada de hábitat en gran parte de su área de distribución, lo que hace que la especie esté cerca de calificar como Vulnerable según el criterio A2c.
Las principales amenazas para esta especie son la destrucción y fragmentación del hábitat (D. Tirira, comunicación personal). Esta especie se considera una plaga agrícola y se caza por su carne.
Se encuentra en varias áreas protegidas.