Ameerega picta Tschudi 1838
Esta especie se encuentra en los biomas Amazonia, Cerrado y Pantanal. Ocurre entre ramas de árboles muertos sobre la hojarasca de tierras bajas tropicales húmedas y secas (Haddad y Martins 1994) y bosques montanos. Habita tanto en bosques primarios como secundarios y se puede encontrar en los bordes de los bosques y en hábitats ligeramente degradados. Los huevos se ponen sobre la hojarasca y los renacuajos se transportan sobre la espalda del adulto a estanques temporales.
Neves et al. (2017) separaron A. munduruku de esta especie, y el concepto restante sigue siendo un complejo de varias especies (Barrio-Amorós et al. 2019, Frost, 2020). Brown y cols. (2019) restringieron aún más el área de distribución de A. picta (junto con A. hahneli) con el nombre de A. imasmari. Además, Guillory et al. (2020) ubicaron a A. yungicola como sinonimia con esta especie, ampliando ligeramente su área de distribución en Bolivia hasta la provincia de Caranavi, Departamento de La Paz.
En la actualidad esta especie incluye la subpoblación venezolana de Heatwole et al. (1965). Según Barrio-Amorós et al. (2019), Ameerega guayanensis (Heatwole et al. 1965) sería el nombre propio de las subpoblaciones guayanesas si se demuestra que son genéticamente diferentes de A. picta de la localidad tipo. Sin embargo, hasta que se publiquen más datos, las subpoblaciones guayanesas se consideran bajo A. picta.
Este taxón se conoce en las tierras bajas del este de Bolivia, Brasil (estados de Mato Grosso do Sul, Mato Grosso, Amazonas, Rondônia y Pará; Haddad y Martins 1994, Uetanabaro et al. 2007), Colombia y Perú. Existe una subpoblación aislada en Venezuela todavía atribuida a esta especie. Probablemente ocurre en áreas intermedias, como el estado de Acre, Brasil. Su rango de altitud es de 200 a 1200 m snm.
Varios cambios taxonómicos recientes han afectado el área de distribución de esta especie desde la evaluación anterior. Algunas subpoblaciones de los estados de Pará y Mato Grosso, Brasil, ahora pertenecen a Ameerega munduruku (Neves et al. 2017), y Brown et al. (2019) restringieron aún más el área de distribución de esta especie al asignar algunas subpoblaciones de la vertiente este-andina y las tierras bajas circundantes del sur de Perú a A. imasmari. Su área de distribución en Bolivia se amplió a la provincia de Caranavi, Departamento de La Paz, tras la colocación de A. yungicola como sinonimia con esta especie (Guillory et al. 2020). Sin embargo, este concepto de especie sigue siendo un complejo de varias especies (Barrio-Amorós et al. 2019, Frost, 2020).
Es relativamente abundante donde se ha registrado y su tendencia poblacional es generalmente estable.
Sin grandes amenazas, es una especie muy extendida con grandes áreas de hábitat adecuado. Existe cierta pérdida de hábitat localizada debido a diferentes actividades agrícolas (cultivos y ganadería). Es probable que esté en el comercio de mascotas, pero esto no representa una amenaza significativa para la población.
Catalogado como Preocupación menor en vista de su amplia distribución y su supuesta gran población.