Rhinella ceratophrys (Boulenger 1882)
Animalia Chordata Anura Bufonidae Rhinella
Sapo cornudo de Marahuaca
Vive en bosques tropicales montanos y de tierras bajas antiguas y de crecimiento secundario (Rodríguez y Duellman 1994). Los individuos se encuentran en la hojarasca. Se reproduce por desarrollo larvario en pequeños ríos y arroyos temporales y permanentes.
Mijares-Urrútia y Arends (2001) confundieron
un ejemplar hembra de Rhaebo nasicus de La Escalera con Rhinella ceratophrys (CBA, observación personal). Barrio-Amorós (1998) dudó de la identidad del ejemplar de Rivero.
registro (basado en un solo juvenil de 12 mm SVL). Sin embargo, Fenolio et al. (2012) verificaron recientemente la. Espécimen venezolano y confirmó su identidad utilizando
datos morfológicos y morfométricos. Informes recientes de esta especie de los tepuyes occidentales de las tierras altas y altas
soluciona su distribución en Venezuela. muestreo adicional y Los análisis determinarán si existe un complejo de especies y puede aclararse aún más (Rojas-Runjaic et al. 2017).
Fouquet et al. (2007a) eliminaron esta especie del Grupo de especies de Rhinella margaritifera
Ampliamente distribuido en la parte superior
Cuenca del Amazonas, desde el noreste de Perú hasta el este Ecuador y el sureste de Colombia, hacia el sur Venezuela. Es común en Colombia pero poco común en otros lugares, aunque puede estar poco estudiado en algunas áreas. En general, se cree que la población es estable.
Se presume su ocurrencia en Brasil (Fenolio et al. 2012) y verificado por Rojas-Runjaic et Alabama. (2017). Estos últimos autores reportaron nuevas localidades para esta especie con ejemplares de Venezuela en Cerro Marahuaca y Cerro de la Neblina, Estado Amazonas. Elevaciones 1.350–2.713 m s.n.m.
Es común en Colombia pero poco común en otros lugares, aunque puede estar poco estudiado en algunas áreas. En general, se cree que la población es estable.
La tala y la conversión de bosques a la agricultura son amenazas localizadas dentro de su amplio espectro y, por lo tanto, se tratan como amenazas menores.
Catalogado como Preocupación Menor en vista de su amplia distribución, su supuesta gran población y su hábitat adecuado en toda su área de distribución. sin embargo su poca ocurrencia permite inferir que debe evaluarse y actualizarse su estado de conservación actual.